La tecnología FDM y los nuevos materiales que se están desarrollando para la impresión en 3D abren infinidad de posibilidades para la fabricación de prototipos y de piezas finales en serie. Pero el abanico de opciones, junto al hecho de que son tecnologías relativamente nuevas, hace que a veces no sea fácil escoger el material más adecuado a nuestras necesidades.

Por ejemplo, en el caso de los materiales ASA y ABS, termoplásticos técnicos de uso general, las diferencias son sutiles, pero pueden tener un gran impacto en el resultado final de la pieza.

En este caso, ambos materiales son aptos para la impresión 3D de prototipos funcionales y piezas finales. Sin embargo, el material ABS tiene un uso más extendido, debido a sus características y adaptación en gran parte de las piezas utilizadas, tanto en la industria profesional como en la de consumo.

¿Cuáles son las principales diferencias entre ASA y ABS?

Mientras que el uso del ABS se ha popularizado para la impresión 3D de piezas en serie, el ASA se usa frecuentemente para la fabricación de prototipos.

El material ASA tiene tres grandes ventajas frente al ABS:

1. En primer lugar, y si lo queremos utilizar para fabricar piezas para exteriores, es el único material resistente a rayos ultravioletas.
2. En segundo, el uso de ASA con nuestra tecnología FDM permite imprimir capas de 0,5 mm de grosor de material sólido, sin uniones, con lo que conseguimos piezas más resistentes, económicas y fabricadas con mayor rapidez.
3. Finalmente, ASA ofrece un mejor superficial, lo que lo hace más adecuado para piezas finales y exteriores.

En resumen, aunque el ABS tiene un uso más extendido, el ASA presenta unas características añadidas que lo hacen muy interesante para determinadas finalidades, como la impresión 3D de piezas finales exteriores.

Comparativa técnica