La impresión 3D se ha posicionado en poco tiempo como una alternativa real y eficaz, para complementar los procesos de producción industriales en la fabricación de series cortas. Sin embargo, los acabados o colores a veces no son suficientes para poderlos considerar como piezas definitivas.

Los moldes de silicona son un útil imprescindible para la producción en serie de piezas y, gracias a tecnologías asociadas a la impresión 3D, también se han posicionado como una alternativa rápida, eficiente y, sobre todo, económica. Pero ¿qué ventajas aporta?

La gran diversidad de materiales poliuretanos utilizados con esta técnica, garantizan unos resultados sorprendentes. Pero, además, las características mecánicas de las piezas son las mismas que podemos encontrar en las piezas inyectadas por moldes tradicionales.

Moldes de silicona en impresión 3D

Los moldes de silicona o colada al vacío se utilizan para series de producción pequeñas o para la fabricación de prototipos de forma más rápida. Para ello, se precisa un modelo que puede realizarse por estereolitografía (SLA). Esta técnica de fabricación aditiva es ideal para la producción de piezas de alta definición y perfecto acabado, que se emplean como masters, para la realización del molde de silicona.

Para ello, se parte de un fichero virtual 3D, al que se le generan las estructuras de soporte necesarias, para la correcta fijación de la pieza en la plataforma. Esto es así porque la máquina de estereolitografía dispone de un tanque lleno de resina epoxi en el interior y sobre el tanque se encuentra el láser que se encarga de polimerizar o endurecer la resina capa sobre capa, hasta que se obtiene la pieza tridimensional entera.

Tras completar el proceso, se retiran los soportes de la pieza manualmente y se limpian los restos de líquido. Finalmente, se realiza un curado superficial mediante un horno UVI, antes de utilizar este máster en el siguiente proceso: las coladas al vacío.

Series cortas con coladas al vacío en impresión 3D

Las coladas al vacío es un sistema que permite hasta 20 piezas finales por molde y obtener unos resultados similares a los termoplásticos existentes actualmente en el mercado.

La calidad superficial y la precisión dimensional de la pieza maestra es un factor determinante, para garantizar un buen resultado en las piezas coladas al vacío. Para ello, el molde de silicona se introduce dentro de una máquina de vacío, para reducir las burbujas y que el contacto con todas las superficies de la pieza maestra sea el óptimo.

Cuando la silicona está curada se corta hasta llegar a la pieza maestra y se separa el molde de silicona, para poder realizar el desmolde de forma adecuado. El molde de silicona se vuelve a utilizar en la máquina de vacío, mientras que la pieza puede someterse a un proceso de post producción, para conseguir las especificaciones de cada cliente.

Esta tecnología está especialmente indicada para la fabricación de piezas rígidas (similares a los ABS o PC), piezas elastómeras (TPU o siliconas) e incluso transparentes. Además, a estas piezas se le pueden incorporar aditivos, para darle características funcionales o coloración a las piezas inyectadas, aplicando distintos tipos de acabados como pintado, cromado, tintado o metalizado, entre otros. Además, se consigue dar respuesta a distintos sectores industriales, desde arquitectura, pasando por automoción, industrial y aeroespacial.

En Pantur disponemos de la tecnología más avanzada en impresión 3D y la experiencia para dar respuesta a las necesidades particulares de los clientes. Se ofrecen soluciones en fabricación aditiva para la industria con unos acabados profesionales, gracias a la gran variedad de resinas que cubren las demandas físicas, mecánicas y térmicas que requiere el mercado actual. Contacta con nosotros y te asesoraremos sobre la mejor solución para tu negocio.